Revivamos una época en la que la gente visitaba las librerías para comprar libros de tapa dura, papelería perfumada, enciclopedias y más. La información se revisaba minuciosamente con bibliografías completas, las historias presentaban dobles o triples sentidos, y las portadas e ilustraciones eran meticulosamente diseñadas por artistas. El arte era humanístico y la literatura, emotiva. La Librería de la Memoria ofrece estos artículos, un testimonio del genio humano, intacto por las influencias de la informática. Quizás seamos la última generación en recordar la pureza de estas ideas, así que celebremos con este nostálgico kit de Rolife. Llena de libros de arte y estantes de madera, esta casa en miniatura DIY es una pieza que llama la atención y que merece estar en tu colección.