La simplicidad es una de las claves del éxito de ¿Alguien ha probado este juego?. Las reglas son fáciles de aprender, lo que permite a cualquier persona integrarse rápidamente en la dinámica. No necesitas ser un experto en juegos de mesa para disfrutarlo. De hecho, lo ideal es relajarse y dejarse llevar por la diversión caótica que propone. Las partidas duran entre 5 y 15 minutos, lo que lo hace perfecto para momentos en los que buscas algo rápido y sin complicaciones. Y si te quedas con ganas de más (lo cual es casi seguro), puedes jugar una partida detrás de otra sin que el entretenimiento se agote.
Este formato lo convierte en una excelente opción para romper el hielo en reuniones, intercalar entre otros juegos de mesa más complejos, o simplemente disfrutar de un rato despreocupado en cualquier momento del día. No es raro que, tras una partida, todos los jugadores acaben riendo a carcajadas y pidiendo una revancha inmediata.